Paseando bajo el sol de la mañana
con el agua correteando entre los dedos,
vi aparecer tu silueta, envuelta en los aromas del amanecer
y corri a abrazarte, estabas fría como la noche y cariñosa como siempre.
El murmullo del oleaje revoloteaba en mis pulmones,
tu sonrisa furtiva emanaba calor y alegría
las rocas soportaban con angustias las embestidas
el brillo de la arena reflejaba el oscuro día,
recordaba tu pasear por la calles frenéticas
el ir y venir de miradas cruzadas
las risas y los disimulos, el empezar de cero.
Tu sonrisa, tus labios, tus palabras.... recuerdos
tu mirada, tus mejillas, tus sentimientos.... recuerdos
tu aroma, tus andares, tus paisajes.... recuerdos
Recuerdos presentes, que cada vez que te miro,
amanecen nuevamente en mi ser.
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